Me encanta las prácticas que están haciendo algunas empresas para evitar que sus empleados se queden a trabajar más de la cuenta. El otro día estuve con una gran empresa que había implantado una política de «prohibido salir tarde del trabajo». Todo lo contrario a lo que viene siendo habitual…
La cuestión es que esta empresa empezó a detectar algunos problemillas en su plantilla. Insatisfacción derivada de algunos virus empresariales que todavía quedan:
- El síndrome de quedarse en la silla hasta que se haya ido tu superior.
- El síndrome de no hacer lo importante hasta que se va a acabar el día.
- El síndrome de querer demostrar que trabajas más que nadie.
- El síndrome de enviar emails a las 23:00h
- El síndrome de las muchas reuniones.
- El síndrome de las comidas copiosas y las tardes sin oxígeno en el cerebro hasta las 18:00h
- Y tantos otros coladeros de productividad en las empresas.
Prohibido salir tarde
La cuestión es que esta empresa se lo tomó en serio e hizo lo que tenía que hacer con su personal de oficinas: Prohibió salir tarde.
Suena un poco extremista, incluso algo desmedido.
¿Qué ocurrió?
Además de que fue una situación muy divertida, lo que en general pasó es que la productividad aumentó un poco, la eficiencia creció y las personas hacían más en menos tiempo.
Tambíen es cierto que todo el mundo había sido formado en cómo sacar más partido del tiempo y en técnicas para organizarse mejor. De lo contrario esta medida habría fracasado seguramente.
Es lo mismo que aquellas empresas que diseñan una oficina abierta, o lo unen a cierta cultura del trabajo en silencio y de evitar interrupciones, o lo que parecía motivador acaba convirtiéndose en un gallinero.
Pero en esta empresa todo funcionó, porque formaba parte de un cambio cultural premeditado.
Es lo que tiene acotar el horario de trabajo de una persona responsable, que cumples lo que tienes que hacer en el tiempo que dispones.
Ya lo dijo Ciryl Parkinson: “Toda tarea se expande hasta ocupar el espacio de tiempo pensado para ella”.
De esta forma si trabajamos 12 horas haremos una serie de tareas y si trabajamos 8 seguramente hagamos las mismas. Sólo que en 12 horas nos permitiremos perder más el tiempo…
Podemos:
- Poner más reuniones inútiles.
- Perder más el tiempo en las reuniones.
- Tomar más cafés y mantener esas “conversaciones de máquina de café”.
- Interrumpirnos los unos a los otros para impedirnos trabajar inconscientemente.
- Permitirnos ser interrumpidos.
- Decir que Sí a todo.
- Ser impulsivos y perder la atención…
- No controlar nuestra productividad y logro de tareas.
Lo que hizo esta esta empresa le hizo mejorar en varias dimensiones:
- Aumento de la productividad.
- Empleados más felices que acababan de trabajar a las 18:00h
- Menos consumo energético.
- Empleados más saludables.
- Empleados con mayor conciliación familiar.
- Empleados con mayor “retribución”, ya que después del cambio no tenían que contratar a nadie para que cuidara hasta tarde de los niños.
- Empleados más motivados.
La cuestión es que todo esto es posible. Y sólo hace falta un pequeño gesto de atrevimiento por parte del empresario y la dirección para lograrlo. Las mejores empresas ya lo están haciendo ¿y la tuya?
Por cierto, una fórmula infalible que me comentó alguien consistía en hacer que la alarma se active pasados 15 minutos de la hora de salida. De esta forma nadie podría quedar en la empresa más tarde, cero excusas. Gran idea, sin duda.
Qué es lo que te recomiendo para conseguirlo:
- Sensibilizar a todos sobre la importancia de la gestión de la productividad personal: formación y programa de cambio de chip.
- Atreverse y probar durante 30 días a acotar el horario de salida hasta 15min después de la hora oficial de salida.
- Consolidar el cambio con más formación y nuevas formas de seguir aumentando la productividad.
O pensamos en este tipo de soluciones en términos serios o acabaremos siendo poco competitivos… e infelices. Creo que es momento de empezar a dejar de trabajar hasta tan tarde, y ser más productivos… y felices.
Que tengas un gran día.
11 comentarios en “Prohibido salir tarde del trabajo”
Excelente aportación, y me pregunto ¿quién educará tanto al empresario como al empleado?, en España está muy arraigado este vicio laboral por decirlo de alguna manera. Hay paises en Europa que salir más tarde de las 5:00 de la tarde está mal visto.
A ver si lo conseguimos Miguel, un abrazo!
Es una tendencia que empieza a implantarse, ligada con la idea de «Empresa saludable» donde la palabra conciliación sí que toma sentido y donde productividad es algo más que un concepto empresarial. Buen articulo!
Gracias Cristina por tus comentarios. Un fuerte abrazo.
Excelente articulo.
Buena práctica la de optimizar el rendimiento de los colaboradores, logrando que en poco tiempo (8 horas) logren los objetivos del día y puedan tener vida familiar y social.
Gracias por comentar Alfredo 😉
Gracias Cesar, de estas cosas no se habla en las empresas ¿quien le pone el cascabel al gato? pero muy acertado… postureo, presentismo y ¿quien engaña a quien?
Vaya que sí José Joaquín! todo un sistema a mejorar. Un abrazo y feliz semana
Cesar excelente!… incluso muchas veces he visto que son los empleados los que promueven estos escenarios para protagonizar.
Gracias Carmen!