En las horas de sueño es cuando cargamos las pilas, cuando realmente nos recomponemos para dar lo mejor de nosotros mismos al día siguiente. Hoy me gustaría darte dos consejos para dormir bien, ya que es fundamental si quieres hacer que tu vida tenga el máximo sentido.
No sabemos dormir bien
Muchas veces pasamos por alto la importancia de un sueño en condiciones y entonces es cuando empiezan los desajustes en tu sueño y, por lo tanto, en tu estado anímico y en tu vida.
No siempre somos conscientes de que al dormir nuestro cerebro y nuestro cuerpo se está regenerando, está haciéndose el mantenimiento necesario para poder seguir viviendo en condiciones óptimas. Durante las fases de sueño REM y sueño profundo en nuestro cuerpo ocurren multitud de procesos interesantes que hay que respetar y que llevan su tiempo, de ahí la importancia de considerar el sueño la prioridad número uno para vivir.
No podemos menospreciar la importancia de dormir en condiciones óptimas tal y como necesita nuestro cuerpo. A los prisioneros de guerra les privaban del sueño y les hacían ser más dóciles, manipulando su voluntad y provocando incluso que tuvieran un estado de locura transitoria.
Repetidos estudios sobre el sueño convergen en dos puntos que son fundamentales para dormir bien:
Horas de sueño
Las horas de sueño de un adulto tienen que ser entre 7 y 8. Si fueran menos de 7 horas tienes que saber que es cuando empiezan las complicaciones: pueden aparecer problemas derivados del estrés, cardiovasculares y otros. La falta de sueño provoca desórdenes tan importantes como que es hoy en día responsable de mucha de la obesidad que sufre la sociedad actual. Además de que no seguimos la mejor dieta del mundo, claro.
A partir de 8 horas también empiezan los problemas. Aviso por si hay muchos amantes de seguir pegados a las sábanas leyendo esto.
Por cierto, las horas de sueño no son acumulables. Tu salud no mejora cuando duermes durante 4 días 5 horas y luego el fin de semana duermes 9.
La cuestión es que dormir poco empeora tu vida y como suelo decir cada vez que hablo de esto: vivirás menos años y serán de peor calidad.
Existen multitud de síntomas, yo al menos el que identifico con más frecuencia cuando me falta sueño es que mi cuerpo no elimina el estrés y entonces es bien fácil que se me pince en la espalda uno de los músculos que están cerca del omoplato, teniendo que visitar a un fisio que me lo haga volver a su condición natural.
Es evidente que la vida nos trae momentos difíciles en los que no siempre dormimos todo lo que quisiéramos, por ejemplo cuando tienes un bebé en casa. Pero incluso en estos casos se puede ser más o menos fiel a las horas de sueño. A veces ponemos cualquier excusa (y la más sufrida son nuestros hijos) para no alimentarnos correctamente, dormir bien, viajar, cuidarnos… Es obvio que suponen un desafío, pero eso no lo podemos cambiar, lo que sí puedes hacer es respetar más tu principal activo: tu cuerpo y su descanso.
La cuestión para respetar nuestras horas de sueño es contar, tan fácil como eso. Si tienes que despertarte a una hora determinada ¿a qué hora te tienes que ir a la cama? En mi caso que suelo despertarme a las 6:00, mi hora de ir a la cama es entre las 22 y las 23, habitualmente a las 22:30 suelo estar en la cama a punto de caer dormido. De esta forma aseguro las 7:00 horas que mi cuerpo necesita para estar despierto.
Consistencia
La siguiente conclusión de los repetidos estudios durante el sueño es que hay que ser consistentes, es decir, tratar de acostarse y despertarse siempre a la misma hora. Cuando te acostumbras es bien fácil, aunque reconozco que hay personas a las que les cuesta hacerlo.
Los desajustes al ser consistentes con las horas de ir a la cama y salir de ella provocan también que nuestro cuerpo no descanse lo suficiente.
En casa no nos importa demasiado si es fin de semana o no, incluso si estamos viendo una película genial (cosa que nunca hacemos por la noche). Es muy difícil (de hecho casi imposible) que nos acostemos más tarde de las 23:45.
Por último y si el bolsillo te lo permite, compra el mejor colchón que veas en la tienda. En ocasiones buscamos «colchones en oferta», de hecho hay un negocio brutal respecto a ello, pero pensemos que ese lugar en el que vas a pasar casi un tercio de los próximos 10 años (vida media de un colchón), no es algo para comprar a la ligera, ni buscando el producto más económico. Mi recomendación: colchón de fibras naturales con muelles ensacados (cuántos más mejor), añadiéndole un topper de calidad para lograr el efecto nube que tanto nos hace descansar.
Aquí te dejo un video en el que profundizo en la importancia que tiene el sueño para tu vida:
Que tengas un gran día.
2 comentarios en “Consejos para dormir bien”
Muy interesante.
Gracias cesar por sus conceptos esto nos hace reflexionar que devemos descansar con diciplina para que nuestro cuerpo se mantenga sano y vigoroso